viernes, 15 de febrero de 2008

Universos sin control - 7º Capítulo

María cayó al suelo estrepitosamente. Un gran rayo sonó estrepitosdamente. De su cuerpo brotaron ríos de sangre, que se fusionaron con las lágrimas que nacían de los ojos de Jhon, arrodillado ante el cadáver de su amada... No... no era posible... Por más que lo creía, más se obstinaba a hacerlo... era su chica... su chica... con la que iba a estar junto el resto de su vida...

- Resignate, Jhon. Su alma no tenía esperanzas. Tú si las tienes, pero has de elegir: Estas conmigo o contra mí.

El comentario de Schröder le enfureció. María era lo que más quería... su casa era su vida... todo destrozado ya. No. No se aliaría con el. Se secó las lagrimas y miró al capitán, histérico. Nunca se juntaría con alguien capaz de hacer eso.

- Te dejo 3 días para pensártelo. Y, te aconsejo, elige la opción que te favorezca...

Schröder desapareció entre las sombras, dejando a Jhon solo.

Solo ante su familia, asesinada.

Solo ante sus recuerdos desaparecidos.

Solo ante su infancia destruida.

Solo, sin su vida arrebatada.

Solo, sin la chica de sus sueños.

Solo, eternamente solo.

Se cayó al suelo. Habían pasado tantas cosas en tan poco tiempo... ganado historias para contar a sus nietos, si llegara a tener... perdido muchas otras, más importantes. Acarició la cara de María. Suave... su pelo dorado brillaba ante los ojos de Jhon. O serían sus lágrimas. Aun muerta, estaba demasiado bella para ser cierto. Y lo era.

No aguantó el dolor. Rápidamente, cogió su Katana y se la apuntó hacia su corazón. Su vida no tendría sentido sin ella.

Cerró los ojos.

De repente, sintió como alguien le cogía la Katana.

- No, no debes morir.

Al abrir los ojos, vió como Gabriel sostenía su katana. Detrás suyo apareció Alucard, son semble triste.

- Lo siento... Volvamos a la base con el cádaver, creo que Vidar ya está alli. Él sabrá que hacer.

Alucard cargó con el cuerpo de Maria, y marcharon de vuelta a la base. Jhon, aunque en cuerpo estaba, en su mente viajaba por los recuerdos que mantenía de ella... Ella... era muy joven... recordó el momento en el que la vió por primera vez, en el espacio rosado... los momentos en beshtre... en el Hotel semi-derrumbado... esto tenía que ser un sueño... si, eso tenía que ser... o una broma... a la vuelta de la esquina estarían todos sus amigos, y gritarían ¡Sorpresa! y todo eso...

Llegaron a la Base. Barbarroja, al verlos tristes, le dió el Pésame.

- Tranquilo... Vidar está aqui, llegó a la base...

Jhon se fijó entonces en una esquina. Un anciano, con barba que llegaba hasta el suelo, observaba desde allí.

- ¿Tú eres Vidar?
- Si, soy yo. -su voz sonaba muy joven para ser un anciano- Siento lo de María. Tambien se lo que has debido sufrir. Pero tranquilo. Lo de maría no es del todo grave. Se la puede resucitar...
- ¡¡¿En serio?!!
- Pero con serios problemas. Podría sufrir secuelas.
- Me da igual... yo la amo... la necesito...
- Necesitaría a alguien dispuesto a sufrir para ayudarla a volver...
- Yo mismo. Sin ella no tiene sentido mi vida.

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La vida es bella... Schröder pensaba desde lo alto del Nimbus. Desde ahí se veía la ciudad en caos. El cielo seguía ennegrecido. Las gotas de lluvia inundaban el techo de las casas. Clac, clac, clac... Poco a poco empezó a caer granizo. Sonrió. Esta era su ciudad. Los ciudadanos gritaban desde abajo. Sangre a borbotones llenaban las calles de la metropolis. Gritó su risa malvada, que tronó por todos los callejones. Llegaba el momento de terror.

- Tres días, Jhon... y acabaré con todos...

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PD: Comentad, plissss... que no se si voy bien o mal...
Se me olvidaba: SORPRESA PARA EL 8º CAPITULO

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